EMBARAZO ¡PRECAUCIÓN CON...!

LÁCTEOS NO PASTEURIZADOS:  tanto leche como lácteos deben haber sido sometidos a pasteurización o esterilización. De esta forma evitamos la contaminación por microorganismos, especialmente la Listeria. Por supuesto que el consumo de leche cruda, que recientemente ha estado tan de moda, esta totalmente contraindicada (para cualquier persona) pues puede contener microorganismos potencialmente peligrosos como Campylobacter, Escherichia Coli, Salmonella o la Listeria.

PESCADOS AZULES DE GRAN TAMAÑO: Ojo, pueden contener altas dosis de mercurio. Hablamos del emperador, atún, lucio o tiburón (cazón, marrajo). Sin embargo, si podría ser válido pescado azul más pequeño como anchoas y sardinas. El pescado blanco es muy recomendable 2 o 3 veces por semana.  

PESCADOS Y MARISCOS CRUDOS O AHUMADOS SIN TRATAMIENTO PREVIO : Se recomienda que cualquier tipo de pescado haya sido previamente congelado (al menos 5 días), o bien cocinado correctamente. De esta forma prevenimos la intoxicación por anisakis.

CARNES CRUDAS POCO HECHAS O CURADAS: De igual forma que con el pescado, se recomienda que las carnes sean sometidas a un correcto tratramiento térmico, o se congelen previamente a su consumo. El problema puede venir por parte del microorganismo Toxoplasma. Durante el primer mes de embarazo, se realiza una prueba para ver si la embarazada tiene anticuerpos contra este parásito. Si es así, habría defensas en el organismo para combatir esa infección.

 HUEVOS CRUDOS: Nuevamente el tratamiento térmico nos protegerá de la bacteria Salmonella.

ALCOHOL: Suprimirlo totalmente de la dieta. Puede causar defectos neurológicos en la descendencia y afectar a la inteligencia futura del niño.

CAFEINA: Se recomienda limitar su consumo. No sobrepasar una taza de café diaria (200 mg diarios)

SE RECOMIENDA : Un consumo abundante de frutas verduras y hortalizas, siempre y cuando se laven y pelen correctamente.